Refugiados en América del Sur y actividades del Mercosur

Por Arthur José Pavan Torres.

Magíster en Derecho por la Universidad Nove de Julho – Uninove (2019). Postgrado de Especialización en Derecho Público Global por la Universidad de Castilla-La Mancha, UCLM, España (2018). Especialista en Derechos de Difusos y Colectivos por la Escuela Superior del Ministerio Público de São Paulo – ESMPSP (2014). Especialista en Derecho y Procesal Civil por el Centro Universitário Salesiano – UNISAL (2010). Diplomado en Derecho por la Universidad Bandeirante de São Paulo (2003). Profesor de la Escuela Superior de Derecho OAB/SP, de la Facultad Monitor y de la Pontificia Universidad Católica de São Paulo (PUC-SP). Jefe de Oficina de la Junta de Educación del Estado de São Paulo (desde 2013).

Una de las dimensiones del derecho internacional de los derechos humanos es la salvaguardia del bienestar de las personas que se ven obligadas a huir de su país de origen por temor a ser perseguidas por motivos de raza, religión, nacionalidad, pertenencia a un determinado grupo social u opinión política, así como violaciones graves y generalizadas de los derechos humanos y conflictos armados.

Después de la Segunda Guerra Mundial, debido a la necesidad de ayudar a millones de europeos que huyeron o perdieron sus hogares, se creó la oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) en 1950, luego se aprobó la Convención sobre el Estatuto de los Refugiados de 1951 y su Protocolo Suplementario de 1967, documentos que describían la protección de los refugiados.

Las estadísticas de ACNUR muestran que en 2022 había 27,1 millones de refugiados y 4,6 millones de solicitantes de asilo en todo el mundo[1].

Hoy, Sudamérica es uno de los principales destinos de refugiados en el mundo, por la migración que se da en el corredor bilateral formado por Venezuela y Colombia, donde más de 1,7 millones de personas salieron del primer país por el segundo, dato que ocupa el puesto 17 en el ranking de los 20 corredores migratorios más grandes del mundo en 2020[2].

La situación actual de Venezuela ha repercutido notablemente en los flujos migratorios de la región, y sigue constituyendo una de las mayores crisis de desplazamiento y migración del mundo. A junio de 2021, habían abandonado el país unos 5,6 millones de venezolanos, y aproximadamente el 85% de ellos (alrededor de 4,6 millones) se habían trasladado a otro país de América Latina y el Caribe. La inmensa mayoría de estos migrantes han abandonado el país en los últimos cinco años. Entre los principales destinos de los refugiados y migrantes venezolanos dentro de Sudamérica figuran Colombia, Perú, Chile, Ecuador y Brasil.

En 2020, los venezolanos representaban la segunda mayor población de desplazados transfronterizos del mundo, después de los sirios. La ACNUR entiende que los “venezolanos desplazados al extranjero” forman una categoría aparte, para reflejar la crisis de desplazamiento actual. Esta categoría no incluye a los refugiados y solicitantes de asilo venezolanos. Al final de 2020 había aproximadamente 171.000 refugiados registrados de la República Bolivariana de Venezuela, y cerca de 4 millones de venezolanos desplazados no reconocidos oficialmente como refugiados en todo el mundo. Alrededor del 73% de los refugiados y migrantes buscan refugio en países vecinos de Sudamérica.

Ecuador es un país de destino y tránsito para personas que necesitan protección internacional. En las últimas dos décadas, el país ha albergado a una de las mayores poblaciones de refugiados reconocidas en América Latina, la mayoría de los cuales han huido de Colombia con una población de 100.000 habitantes. Ecuador también se ha convertido en el principal destino de los refugiados y migrantes venezolanos.

Ya en Brasil, a finales de 2022 había alrededor de 65.000 refugiados reconocidos, de los aproximadamente un millón de extranjeros que residían. Esto corresponde a menos del 0,5% de la población brasileña. En la última década, tres olas migratorias han sido libres en el país: desde 2010, la de los haitianos; desde 2015, la de los sirios; y a partir de 2018, la de venezolanos, que corresponden a 53.000 con reconocimiento de refugio[3].

El flujo migratorio gana contornos que afectan sustancialmente las relaciones entre los países miembros o asociados del Mercosur, especialmente Bolivia, Brasil, Colombia, Ecuador, Perú y Venezuela[4].

Bajo el Sistema Regional Americano de Derechos Humanos tenemos la Declaración de Cartagena de 1984; la Declaración de 2004 y el Plan de Acción de México para fortalecer la protección internacional de los refugiados en América Latina; y la Declaración de Brasilia sobre la Protección de los Refugiados y los Apátridas en el Continente Americano de 2010;, la Declaración de Río de Janeiro sobre la Institución del Refugio del 10 de noviembre de 2000; la Declaración de Santiago sobre Principios Migratorios, ítem IV; y la Declaración de la Reunión de Ministros de Justicia e Interior del MERCOSUR sobre los Principios y Directrices Básicos del MERCOSUR en materia de Justicia, Seguridad y Derechos Humanos, punto XXI.

En 2012 se firmó en Fortaleza la Declaración de Principios del MERCOSUR sobre la Protección Internacional de los Refugiados. En esta ocasión el bloque se reconoció como un espacio humanitario para la protección de los refugiados, con énfasis en la cooperación y la colaboración, con el objetivo de buscar formas más adecuadas de abordar el tema.

En la última década se ha avanzado poco en la normalización o incluso en las medidas prácticas del MERCOSUR para debatir el tema de los refugiados, como se ha hecho en la Unión Europea.

El último gran evento del Mercosur sobre refugiados fue el Taller: Estrategias de Acogida de Refugiados, realizado en octubre de 2019, que trató sobre las autoridades centradas en la acogida de refugiados: elementos centrales en el diseño de políticas públicas y la Protección Internacional de Refugiados: perspectivas institucionales, regionales y nacionales, pero poco se avanzó posteriormente debido a la pandemia de COVID 19, iniciada en 2020.

El 2 de junio de 2022 fue realizada la Reunión de Comisiones Nacionales de Refugiados (CONARES) del Mercosur[5], una oportunidad en donde los estados Miembros y Asociados discutieron sobre intercambio de información respecto del tratamiento y respuesta a la situación de personas refugiadas y migrantes provenientes de Afganistán, Haití y Ucrania;  intercambio de información referente al tratamiento y respuesta a la situación de personas refugiadas y migrantes provenientes de Venezuela; intercambio de información sobre el tratamiento dado por los países ante situaciones en que la persona solicitante de la condición de refugiado no posee documento de identidad personal; continuidad de los trabajos referentes a la propuesta de construcción de herramientas para el intercambio de información estadística; y continuidad de los trabajos referentes a la propuesta de herramientas de jurisprudencia administrativa.

Las conclusiones de la reunión versaron sobre agilizar la regularización migratoria del status de refugiado, no permitiendo la devolución de personas -garantía do non refoulement -, no rechazo en frontera, no detención por ingreso ilegal y del cambio de informaciones entre las CONARES.

El tema de la migración en Sudamérica es, además de un tema humanitario, una cuestión de naturaleza económica que debe ser abordada por el Mercosur con la urgencia que la situación exige para el desarrollo económico compartido e inclusivo que pueda beneficiar a todos, en consonancia con lo previsto en la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible.


[1] Datos básicos ACNUR. Disponible en: <httpss://www.acnur.org/es/datos-basicos.html>.  Acceso en: 18 ene. 2023.

[2] Informe sobre las Migraciones en el Mundo 2022 de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), pg. 28. Disponible en: <httpss://publications.iom.int/books/informe-sobre-las-migraciones-en-el-mundo-2022>. Acceso en: 25 ene. 23.

[3] Datos del Ministerio de Justicia y Seguridad Pública de Brasil. Disponible en: <httpss://app.powerbi.com/view?r=eyJrIjoiZTk3OTdiZjctNGQwOC00Y2FhLTgxYTctNDNlN2ZkNjZmMWVlIiwidCI6ImU1YzM3OTgxLTY2NjQtNDEzNC04YTBjLTY1NDNkMmFmODBiZSIsImMiOjh9&pageName=ReportSection>. Acceso: 19 ene. 2023.

[4] Queda suspendido de todos los derechos y obligaciones inherentes a su condición de Estado Parte del Mercosur, de conformidad con lo establecido en el párrafo 2º del artículo 5 del Protocolo de Ushuaia. Disponible en: <httpss://www.Mercosur.int/pt-br/decisao-sobre-a-suspensao-da-republica-bolivariana-da-venezuela-no-Mercosur/>. Acceso en: 18 ene. 2023.

[5] Puede acceder a los documentos de la reunión en: <httpss://calendario.Mercosur.int/public/reuniones/doc/9040>. Acceso en: 25 ene. 2023.